Con sedes en Chile, España y Colombia, la educación relacional se posiciona como una nueva forma de enseñar. Julio Fontán, su fundador, vendrá a la Argentina y explicará los pilares de este proyecto.
El profesor Julio Fontán, es el creador del método de educación relacional, una nueva propuesta pedagógica que educadores de distintos países en el mundo están mirando con atención. El especialista formará parte del III Congreso Internacional de educación, desarrollo e innovación que tendrá lugar en el Palais Rouge, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los días 19, 20 y 21 de mayo.
Fontán explica que la educación relacional es un modelo educativo para personalizar la educación basado en dos premisas: el respeto por cada estudiante, y el generar valor de vida para él y su entorno a través de la educación. Su método educativo lleva ya 18 años, y pasó del ámbito privado a ser adoptado por 17 escuelas públicas en Colombia.
Es un proyecto que llama la atención por el respeto hacia el ritmo de cada niño en su aprendizaje, el desarrollo sus necesidades, su motivación y deseos. Este respeto es el que lleva a la personalización del aprendizaje. El niño es responsable, una persona autónoma, sin embargo, entender cómo conseguir esta autonomía, sigue siendo tema de investigación.
Para Fontán un proyecto educativo tiene que tener como principio “entender que cada estudiante es único, distinto a los demás, y que el único modo de acompañarlo es ayudándolo a que logre las cosas. Entonces cambia la forma de trabajar de los educadores: yo no le puedo enseñar autonomía, yo lo ayudo a que desarrolle su autonomía”. Para este docente los planes de estudio ya no pueden ser estáticos sino dinámicos; y cambiar en la medida que el estudiante cambia”
Los estudiantes están ordenados no por curso sino por niveles de autonomía, dependiendo de esto, acompañamos. Pero, hay que tener mucho cuidado, la autonomía no se puede confundir con abandono.
¿A que se refiere con el término “relacional”? Fontán dice que “El mundo está en constante cambio, entonces hay un nuevo elemento que no estaba tan presente en el sistema educativo: el desarrollo de la capacidad de relación con un mundo altamente cambiante”
“El niño pequeño se relaciona espontáneamente con su entorno, y va formando su estructura de pensamiento, pero, cuando llega a la escuela todas las relaciones comienzan a ser impuestas. El problema es que, si queremos que ese estudiante tenga calidad de vida, el primer elemento que tenemos que dejar ir son este tipo de relaciones impuestas, y lograr que el estudiante esté construyendo todo el tiempo, nuevas formas de relación con el mundo”
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