A partir de la convocatoria a un “Diálogo por un Pacto Educativo Argentino” realizada por la Comisión de educación de la Conferencia Episcopal Argentina a partir de agosto de 2022, enmarcada en el llamado del Papa Francisco a un Pacto Global Educativo, comenzamos un proceso de escucha donde estudiantes, familias, docentes, directivos, representantes de los trabajadores y del ámbito empresarial y cooperativo, académicos y funcionarios de distintas regiones del país, compartieron su parecer sobre los desafíos actuales de la educación argentina que deben ser abarcados para consolidar a la Educación como una Política de Estado.
Muchas han sido las coincidencias respecto de aquellas temáticas prioritarias que debemos afrontar como sociedad si queremos proyectar un mejor futuro para nuestros niños, niñas, adolescentes y jóvenes, las que han sido volcadas en el documentado de trabajo que fue presentado en noviembre de 2023 los obispos en la asamblea plenaria
Lejos de ser un trabajo terminado es recién el primer paso de un proceso. Dicho documento quiere ser el puntapié para profundizar la reflexión´ y servir para su implementación concreta, previéndose la presentación de propuestas tanto ante el legislativo como al ejecutivo.
Un primer núcleo de acuerdos se centraliza en promover la centralidad de la escuela. devolviendo a la escuela la iniciativa didáctica y recuperando la pedagogía; que todas las niñas, niños y adolescentes estén en la escuela por más tiempo, la ampliación de la universalización de la educación de la primera infancia, el fortalecimiento del nivel secundario como desafío apremiante, mejorar la primaria asegurando los procesos de alfabetización. Otros aportes refieren a la formación docente, el financiamiento educativo, la inclusión educativa, la relación educación trabajo y el vínculo educación tecnología, entre otros
Durante este año, les proponemos profundizar a lo largo de nuestras publicaciones cada uno de los aspectos identificados con el propósito de seguir trabajándolos para que se concreten en nuestras aulas.
Estamos seguros que la verdadera libertad, que tanto se reclama, solo es posible con una mejor educación, que incluya a todos, especialmente a quienes se encuentran en una situación más vulnerable y que permita un acceso igualitario que permita la adquisición de los saberes que permitan la inserción en una sociedad más justa
Grande es el desafío, empecemos a caminarlo
