Así habla el hermano de La Salle, Juan Antonio Ojeda Ortíz, disertante del Curso de Rectores 2022. Entonces compartirá cuál es la visión del Papa Francisco sobre el pacto educativo global, además de aclarar cómo sumarnos a este movimiento desde las escuelas; ser parte de él y firmarlo.
Juan Antonio Ojeda Ortíz, es oriundo de las Islas Canarias, maestro, pedagogo y Doctor en Educación. Como director de Proyectos de la Oficina Internacional de la Educación Católica, (OIEC) ha coordinado la edición del libro “Luces para el camino”, sobre el pacto educativo global, difundido en la revista CONSUDEC de agosto.
Ojeda escribió en la introducción de este ejemplar que contamos con “un libro participativo, creado como un espacio de encuentro y de diálogo… abierto, incompleto, pero que persigue inspirar a todos, contagiaros, para animaros a compartir vuestras visiones, debatir, buscar y trabajar juntos desde cualquier rincón del mundo por la educación”. Es un material que puede encontrarse en línea y que recoge experiencias mundiales, dando voz a niños, jóvenes y docentes desde las distintas realidades.
El profesor español que también es consultor de la Congregación para la Educación Católica del Vaticano, repite que hoy “todo nos está empujando en esta dirección de pactar; tejer alianzas entre nosotros y con otros. Y esto corresponde tanto a la Iglesia como a la sociedad civil”
Ojeda señala que “en las últimas décadas hemos tenido muchos desafíos en torno al hecho educativo, y sin embargo, nos sigue caracterizando la inacción. Existen propuestas que nunca han cuajado. Nos asombramos de las palabras, pero nos cuesta ponerlas en práctica; y llevarlas a la cotidianeidad del aula”
“La educación tiene que cambiar” dice, citando al papa Francisco. “Y podemos comenzar con la escucha activa desde la humildad, para aprender con otros. Porque pactar es una expresión de amor, exige salir de nuestras seguridades ya que no estamos acostumbrados a trabajar juntos, sino a competir; cada uno por su lado”
Esto nos lleva al compromiso, a la acción.
No hay que tener temor, el papa decía en 2015 que los educadores y los sistemas educativos están llamados a cambiar y a comunicarse amorosamente con los niños y jóvenes en sus realidades concretas. Educar es amar. Y tenemos que cambiar significativamente, profundamente.
La escuela católica
La mirada del hermano de La Salle llama a la reflexión; según él “la escuela católica, en muchos contextos, va perdiendo legitimidad, y autonomía (que es la identidad) y también significatividad. Se ha vuelto elitista, excluyente, y es a veces muy rígida cuando debería abrirse a dialogar, acoger, y ser mucho más flexible”.
El educador sostiene que también “hemos perdido autonomía, porque dependemos del estado, las leyes, y la moda. Por tanto, hemos llevado parámetros de calidad de la escuela católica al terreno mercantil, más que al terreno del evangelio y de la buena noticia…”
El pacto educativo es una oportunidad
Juan Antonio Ojeda Ortíz colaboró también con una publicación del movimiento educativo para cambiar el mundo Design for Change. Esta organización global ha creado un marco metodológico para que los alumnos aprendan a pensar por sí mismos, desarrollen su empatía hacia las necesidades de los otros y se conviertan en protagonistas de su propia historia (o change makers) creando soluciones a los problemas y desafíos que surgen en su entorno. Las fases de este proyecto son: siente, imagina, actúa y comparte.
Esta visión ha unido a la Fundación del grupo editorial SM y Design for Change por una misma causa: ayudar a la escuela a impulsar la metodología del cambio a través de materiales educativos y un entorno digital colaborativo. Se trata de un libro inspirador que salió en 2017 dentro de la colección Biblioteca de Innovación y cuenta las experiencias de diferentes colegios que han introducido esta metodología y consejos para ponerla en marcha en tu propia aula.
