“Vivimos en un mundo cada vez más complejo, y la escuela afronta el desafío de ser más eficiente y eficaz en la formación de los estudiantes”. Un congreso virtual organizado por TICMAS, plataforma que acompaña a estudiantes, docentes y escuelas en su transformación digital, analiza y contribuye a pensar en nuevas alternativas educativas para las clases.
Fuente: ticmas.com
Distintas investigaciones dan cuenta de que la mayoría de los niños y adolescentes de hoy van a trabajar en empleos que aún no existen y van a utilizar tecnologías y dispositivos que no se han inventado todavía. Justamente, para pensar herramientas concretas para el presente y para el futuro de la educación, entre el 9 y el 11 de septiembre se llevaron a cabo en TICMAS, las primeras Jornadas Iberoamericanas de Educación, que realizamos de forma virtual y que contaron con figuras de la educación y de la cultura de América Latina y de España.
Uno de los paneles tuvo como invitados a la politóloga Karen Zeolla, y a la socióloga Johanna Heinberg (ambas de Laboratorio Futuro), junto al ingeniero Mariano Sciuto. Durante casi una hora, los panelistas compartieron algunas reflexiones sobre tendencias, metodologías y herramientas para llevar a la práctica la innovación educativa que anhelan muchas escuelas.
“El pensamiento de futuro es un pensamiento para la transformación. Es muy útil para pensar la exploración de los futuros posibles”, inició Zeolla. Y continuó: “El future thinking tiene su razón de ser en romper con la mirada lineal de futuro y poder trabajar aplicando la inteligencia colectiva en la exploración de los futuros posibles. En educación, el future thinking nos permite construir futuros posibles, cuestionando los futuros tradicionales”.
Por su parte, Sciuto afirmó: “Las metodologías ágiles nacen como una nueva forma de trabajo e implican un cambio de paradigma”. Por esto: “Cuando hablamos de transformaciones organizacionales, hablamos de la evolución de la organización en todas sus aristas de la metodología: sus procesos, sus estructuras, sus liderazgos…” aclaró.
Este ingeniero asegura que, en cualquier institución, incluida la escuela, cuando se habla de evolucionar a un nuevo paradigma se ponen en juego muchas experimentaciones. “Un nuevo modelo necesita de nuevas experiencias: ¿para qué estoy haciendo lo que estoy haciendo?, ¿cuál es el impacto que quiero dejar en la sociedad?”, se cuestiona.
Y concluye: “en las metodologías ágiles, la agilidad no es hacer las cosas más rápido, sino darse cuenta más rápido si las cosas que estás haciendo están causando impacto o no”.
El uso de las TIC en Educación Religiosa
Días antes, en una capacitación de TICMAS liderada por el teólogo Pablo Rozen, se reflexionó acerca de la educación transformadora. En especial de “vincular la educación religiosa escolar y las TICs desde una relación didáctica y no sólo instrumental. Porque también, para el estudiante, es fundamental la forma de comunicar el mensaje de Jesús”.
Las Tics ofrecen una gran riqueza al campo educativo de la educación religiosa escolar, y desde este lugar se puede alimentar y convertir cada encuentro, en un encuentro significativo.
“El ecosistema educativo digital ha cambiado, y no sólo comprende el área curricular, sino que colabora con la articulación didáctica que se desarrolla en cada escuela permitiendo la participación de todos sus actores: alumnos y docentes. Es tiempo de seguir desafiando el presente y enfrentar los retos del futuro fomentando la comunión en un mundo globalizado, difundiendo la pedagogía cristiana” explicó el teólogo.
Por su parte TICMAS, produce un acercamiento a propuestas metodológicas, usando las tecnologías y fortaleciendo la idea del uso de las TICs como mediación didáctica. Además, como agente moderador e inspirador, esta plataforma educativa tiene a su disposición herramientas de gran aporte para la clase, de manera que se vean enriquecidas, fortalecidas y atrayentes.
El rol del docente lejos de ser protagonista central pasa a ser de acompañamiento cercano que identifica la herramienta correcta para fortalecer la dimensión espiritual del estudiante en medio de una sociedad marcada por la información y el conocimiento.
