El Prof. Roberto Pellegrino que se desempeñaba como miembro de la JUREC de 9 de julio falleció el pasado 22 de octubre debido a un accidente cerebrovascular. Con motivo de su partida Mons. Ariel Torrado Mosconi, obispo de su diócesis, compartió el siguiente mensaje manifestando sus condolencias:
«Hondo pensar y sentida gratitud
Profundamente conmovido por la triste noticia del deceso del profesor Roberto Pellegrino, a raíz del accidente cerebrovascular tenido hace unos días, deseo manifestar mi cercanía, en nombre también de la Iglesia diocesana, a su esposa Geraldina e hijos, a su mamá Marta y hermanos, a la entera familia, a la Junta regional de educación católica de la cual formaba parte y del colegio “Nuestra Señora” de Lincoln del cual era Representante legal.
Quiero destacar su persona y trayectoria. Esposo y padre ejemplar, dedicado a su familia a la cual tenía en el primer orden de sus valores y prioridades. Trabajador dedicado e incansable, ponía todo de sí en cuanto emprendía o se le encomendaba. Cristiano comprometido supo vivir su vocación plenamente laical integrado discreta y generosamente, junto a su familia, en su comunidad parroquial.
Aún con la natural conmoción ante su partida, quiero poner de relieve su eficaz contribución de los últimos años a la educación católica en el ámbito diocesano. Persona de consulta por su experiencia y capacidad de valorar adecuadamente los problemas, emprendedor sin dilaciones ante dificultades o problemáticas a resolver y siempre disponible ante requerimientos o urgencias que requerían su aporte. Gracias a su contribución la J.U.R.E.C. y los colegios católicos han crecido significativamente en muchos aspectos.
Semejante pérdida nos deja francamente desolados. Necesitaremos un tiempo para elaborarla y asumirla. La luz de la fe que permite ver aún en medio de la oscuridad de este pesar, la esperanza sostiene, alienta y conforta para poder seguir adelante y el amor que nos mantiene unidos sosteniéndonos unos a otros, nos ayudarán a recomponernos y seguir caminando. Su ejemplo es también su legado que deberá servir de testimonio y estímulo para continuar trabajando por la educación. La oración sentida y confiada será apoyo y sostén. Invocando el consuelo que viene de Dios, los bendice de todo corazón
+Ariel Torrado Mosconi
Obispo de Santo Domingo en Nueve de Julio»